Estaba obsesionado con ella, la acosaba y al final la mató a tiros delante de sus amigas

Carlos Ramiro Chacín
Por Carlos Ramiro Chacín 3 Min de Lectura
3 Min de Lectura

El brutal asesinato de Valeria Leoncino, de 25 años de edad, tiene conmocionada a la sociedad argentina, puesto que la joven fue acribillada por un hombre estaba obsesionado con ella, en la localidad de Concordia, provincia Entre Ríos.

De acuerdo a los testigos, tras salir de su trabajo, Valeria se percató que el hombre estaba afuera de su casa con una actitud extraña. La joven avisó a unas amigas, quienes se acercaron a la vivienda para verificar qué ocurría.

Cuando fueron a confrontar al hombre, este sacó un arma de fuego y le disparó a quemarropa a Valeria . Sus amigas desesperadas intentaron ayudarla, pero la joven murió frente a su vivienda.

Lugar en el que fue asesinada la joven. Foto: cortesía

Las autoridades se dirigieron al lugar para levantar el cuerpo de Valeria e iniciar las investigaciones. En ese sentido, entrevistaron a las amigas de la víctima y estas aclararon que el agresor, identificado como Carlos Passarella, nunca tuvo una relación con la joven.

¿POR QUÉ MATÓ A VALERIA?

En el marco de las investigaciones, las amigas de Valeria le informaron a la policía que Carlos  estaba “obsesionado” con ella. “Ella no quería tener ningún tipo de relación con él, pero él la seguía a todo lado”, explicaron a las autoridades.

“Una víctima mujer atacada por un hombre, evidentemente obsesivo, con un interés hacia la chica, o pretendiendo formar una relación y, ante el rechazo, encuentra este camino, quitar la vida, porque no admite otra posibilidad”, explicó la Fiscalía.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: PRINCIPAL SOSPECHOSO DE DESCUARTIZAR A SU NOVIA MENOR DE EDAD QUIERE DECLARAR BAJO EL «SUERO DE LA VERDAD»

La joven tenía apenas 25 años cuando fue asesinada. Foto: cortesía

Poco después del asesinato, Carlos abordó su auto, se fue lejos de la escena del crimen y se quitó la vida. Las autoridades encontraron un arma de fuego, una caja de balas, sogas y gas pimienta en el vehículo del sospechoso.

La joven había denunciado que Carlos le había hackeado el celular y se hacía pasar por ella en redes sociales. “Mi amiga Valeria fue a la Fiscalía y no le creyeron nada”, acotó una compañera de trabajo de la víctima.

Compartir este artículo