La justicia chilena puso en marcha este miércoles el proceso de extradición de Edgar Benítez, alias El Fresa, quien fue detenido en Estados Unidos y estaría vinculado con el asesinato del militar Ronald Ojeda en Chile.
Tras su captura a mediados de febrero, las autoridades chilenas dijeron que iban a solicitar a Estados Unidos la extradición de Benítez. En tal sentido, el proceso quedó en manos del fiscal Alex Cortez, jefe del Equipo de Crimen Organizado y Homicidios.
Cortez presentó el caso de Benítez ante la Corte de Apelaciones de San Miguel. «El imputado fue formalizado en ausencia por los delitos de asociación criminal, receptación y secuestro con homicidio», indicó.
La Corte de Apelaciones autorizó la solicitud de extradición. Ahora el gobierno chileno tendrá que notificar a las autoridades de Estados Unidos para cumplir los protocolos del trasladado de Benítez.
SU PAPEL EN EL CRIMEN
La Fiscalía chilena determinó que Benítez tuvo un papel crucial en el asesinato de Ronald Ojeda. De acuerdo a las investigaciones, le entregó a José Valverde, el conductor del grupo, el carro en el que se movilizaron los secuestradores.
Benítez llevaba varios años viviendo en Chile, junto a su pareja e hijo. Mientras que se desempeñaba como miembro del Tren de Aragua, trabajaba como chofer en una aplicación de viaje.
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Una vez las autoridades encontraron el cuerpo de Ojeda, Benítez optó por escapar de Chile. Junto a otro sospechoso, identificado como Yankel Ulloa Ledezma, pasó por Perú, Colombia, Panamá, Honduras, México y, finalmente, llegó a Estados Unidos.
Benítez se sumó a otros cómplices que tienen pedidos de extradición, como son Luis Gocho Carrillo y Rafael El Turko Gámez Salas, detenidos en Estados Unidos, y a Carlos Bobby Gómez y Dayonis Boti Orozco, capturados en Colombia.
