Tras dado a conocer los resultados de las elecciones presidenciales en Venezuela, en las que se declaró «ganador» a Nicolás Maduro, lo cierto, es que la izquierda latinoamericana también duda del triunfo pese a este enarbolar las banderas del socialismo heredadas de Hugo Chávez.
Por ejemplo, desde Colombia la administración de Gustavo Petro reaccionó por medio de su canciller, Luis Gilberto Murillo, quien dijo en X (Twitter) que «es importante despejar cualquier duda sobre los resultados» de las elecciones en Venezuela.
Leer Más
LEA TAMBIÉN: MILEI REITERÓ QUE NO CREE EN EL TRIUNFO DE MADURO: «LOS INSULTOS DEL DICTADOR PARA MÍ SON HALAGOS», DIJO
«La comunidad internacional y el pueblo venezolano esperan que prevalezcan la transparencia y las garantías electorales para todos los sectores. Es importante despejar cualquier duda sobre los resultados. Esto implica que los observadores y veedores internacionales presenten sus conclusiones sobre el proceso», escribió.
Y luego agregó: «Hacemos un llamado para que, a la mayor brevedad, se proceda con el conteo total de los votos, su verificación y auditoría de carácter independiente».
Más temprano, apenas minutos de darse a conocer los resultados electorales, el presidente de Chile, Gabriel Boric, dijo que su Gobierno no reconocerá «ningún resultado que no sea verificable».
Enfatizó que los resultados «son difíciles de creer», por lo que exigió «total transparencia de las actas y el proceso». Además, solicitó que «veedores internacionales no comprometidos con el Gobierno den cuenta de la veracidad de los resultados».
Asimismo, el Gobierno de Brasil informó que solicitará al Centro Carter y el panel de expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) un análisis a fondo sobre los resultados electorales anunciados el domingo por la noche.
Para ello, dio a conocer que están a la espera de que se publique por completo los resultados de las elecciones.
También vale recordar, que el expresidente argentino Alberto Fernández anunció que Nicolás Maduro retiró su invitación como veedor de las elecciones presidenciales.
“El gobierno nacional venezolano me transmitió su voluntad de que no viajara. La razón que se me dio es que declaraciones públicas realizadas por mí ante un medio nacional causaban molestias y generaban dudas sobre mi imparcialidad”, indicó Fernández.
Así Cuba quedó acompañada —en su apoyo hacia Maduro— por Bolivia, Honduras y Nicaragua. Lo cierto, es que la izquierda regional y antigua aliada «unánime» del Chavismo ya no es así. Pero ¿por qué? Ellos mismos lo expresaron, los resultados generan dudas.
ELECCIONES EN VENEZUELA
Pasadas las 12:00 de la noche de este lunes, 29 de julio, el presidente del Consejo Nacional (CNE), Elvis Amoroso, proclamó a Nicolás Maduro ganador de las presidenciales tras recibirse supuestamente el 80 % de la transmisión de las actas.
Presuntamente, el aspirante a la reelección obtuvo 5.150.092 votos (51,20 %), mientras que Edmundo González obtuvo 4.445.978 votos (44,2 %). La participación fue, según los propios cómputos difundidos por el CNE, del 59 %.
En tanto, la líder de la oposición María Corina Machado aseguró que Edmundo González Urrutia es el verdadero presidente electo de Venezuela. Dijo que la oposición obtuvo el 70 % de los votos en los comicios presidenciales.
RESULTADOS SIN VERIFICAR
En concreto, la razón por la cual la comunidad internacional sigue reaccionando y no da fe de los resultados, es porque los votos no han sido verificados. Sobre todo, por medio de un proceso transparente. De hecho, delegados opositores no pudieron ingresar a la sede del CNE el domingo, cuando la ley así lo establecía.
Además, la sombra de dudas se incrementó luego de que funcionarios del CNE afirmaran que hubo “una agresión” contra el sistema de transmisión de los datos. Se aseguró que el mismo “retardó de manera adversa” el conteo oficial.
Incluso, dijeron sin ofrecer pruebas ni más elementos, que se ha solicitado una investigación al titular del Ministerio Público (MP), Tarek William Saab, sobre “las acciones terroristas” contra el sistema electoral venezolano, los centros de votación e incluso funcionarios electorales.
Y, por si fuera poco, tampoco se explicó cómo se solucionó la supuesta agresión al sistema informático. Una información clave para esclarecer y detener la cascada de cuestionamientos y dudas sobre el sistema electoral venezolano.
