Médicos expertos solicitaron insistentemente que el presidente de EEUU, Joe Biden, se someta a una prueba de diagnóstico de competencia tras un preocupante informe difundido el jueves, el cual sacudió la política estadounidense al cuestionar la capacidad mental del mandatario para ser apto para el cargo, teniendo en cuenta que aspira a la reelección.
El estudio del fiscal especial Robert Hur menciona que el gobernante de 81 años no puede recordar hechos básicos de su vida y carrera. Asimismo, califica a Biden como demasiado senil para ser procesado por retención indebida de documentos clasificados.
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Al mismo tiempo, el documento detalla que el demócrata «no recordaba cuando era vicepresidente». «No recordaba, incluso cuando murió su hijo Beau» en dos entrevistas ofrecidas en octubre.
A juicio del doctor Stuart Fischer, «algo no está bien». Dice que si incluso es algo menor, «debe explicarse al público».
«El caballo está fuera del establo. No solo [Biden] tiene una enfermedad de algún grado, sino que se ha demorado en producir evidencia objetiva». Además, Fischer explica que nadie ha quedado convencido de la defensa del presidente a la hora de hablar de su memoria.
Pese a que es el jefe de Estado más longevo de EEUU, Biden se ha negado a practicarse pruebas de agudeza mental a pesar de las sugerencia.
PODRÍA SER «UNA ENFERMEDAD INFECCIOSA O FATIGA»
Para Fischer, el aspirante a la reelección posee síntomas que son un indicio de que padece «una enfermedad infecciosa o fatiga».
«No sé cómo este hombre puede tener algo más que un horario suave. Cuanto más se esfuerza, más difícil es para un cuerpo de 81 años responder», detalló, reseñó The New York Post.
Por su parte Ronny Jackson, médico de los expresidentes Barack Obama y Donald Trump, comentó que si Biden se termina quedando con la candidatura demócrata, como parece ser, tendría que someterse «al 100%» a una prueba de competencia mental antes de los comicios presidenciales.
«No necesita una prueba de detección [cognitiva]. Necesita una batería cognitiva real de pruebas, hechas objetivamente, puestas en papel e informadas al pueblo estadounidense por su médico», planteó.
