El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, pasó este jueves por la segunda operación de cabeza en lo que va de semana, luego de que el martes lo intervinieran de emergencia por una hemorragia intracraneal.
«La intervención fue con éxito. El presidente está despierto y conversando”, dijo a medios Roberto Kalil, uno de los médicos del mandatario. En este sentido, el galeno había explicado que esta operación se trató de una intervención de bajo riesgo para “minimizar el riesgo de futuros sangramientos”.
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El procedimiento comenzó alrededor de las 7:10 y duró menos de una hora. Los galenos tienen previsto que este mismo jueves Lula pudiera salir del área de cuidados intensivos.
El pasado martes, el mandatario ingresó de emergencia debido a fuertes dolores de cabeza. Luego de practicar los exámenes de rigor descubrieron «un sangrado de tres centímetros» entre el cráneo y el cerebro, por lo que lo operaron de emergencia.
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La hemorragia se produjo el 19 de octubre en el Palacio de la Alvorada, residencia oficial de la Presidencia, cuando se golpeó la cabeza en el baño y tuvo que recibir cinco puntos de sutura en la nuca.
En aquel momento Lula le dijo en una llamada telefónica a alguien de su partido que la caída ocurrió por una “tontería suya”. “Fue grave, pero no afectó a partes más delicadas”, afirmó.
Hace poco más de un año, en septiembre de 2023, el presidente de 79 años se sometió a una artroplastia total en la cadera derecha, una cirugía para reemplazar, con una prótesis, el cartílago desgastado de esa región del cuerpo. Lula, también sufre de artrosis, un desgaste en los cartílagos que revisten las articulaciones, y que puede limitar el movimiento.
Durante su vida, también logró vencer el cáncer de laringe en 2011, un año después de su diagnostico.
