El empresario Justin Sun pagó 6,2 millones de dólares por la obra llamada «Comediante», que consiste en una banana pegada con cinta adhesiva a una pared. Tras hacer esta valiosa adquisición, reveló qué desea hacer con la pieza.
Sun participó en la subasta de esta pieza en la casa Sotheby’s y formó parte de una histórica puja que sorprendió a la comunidad del arte. Ahora decidió que se comerá la millonaria obra para tener una «experiencia artística única».
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«En los próximos días, me comeré la banana como parte de esta experiencia, honrando su lugar tanto en la historia del arte como en la cultura popular», dijo Sun a los medios de comunicación.
Sun, quien es un reconocido coleccionista de arte, provocó distintas reacciones con estas declaraciones. Algunos críticos y expertos en economía cultura no dejaron de preguntarse sobre el valor de comerse una obra.
¿LA BANANA MÁS CARA DE LA HISTORIA?
Esta obra debutó en 2019 con un precio de 120.000 dólares en subasta. Con el paso de los años, pasó por las manos de varios propietarios hasta que Sun pagó más de seis millones de dólares por adquirir «Comediante».
«Lo que uno compra con «Comediante» no es la banana en sí, sino un certificado de autenticidad que permite reproducir la obra bajo las condiciones establecidas por el artista», dijo David Galperin, jefe de arte contemporáneo en Sotheby’s.
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En tal sentido, Sun no pagó seis millones de dólares por una banana, sino por el certificado de autenticidad de la obra. Especialistas indican que el valor de esta pieza no está en los aspectos materiales, sino en el concepto artístico de la misma.
El empresario no adquirió una banana, sino el certificado y un rollo de cinta adhesiva. Asimismo, le entregaron un manual de 14 páginas con instrucciones para pegar esta frita a la pared, dejando claro que cualquier montaje será considerado original.
