Las autoridades venezolanas siguen investigando el escándalo de corrupción en Petróleos de Venezuela. 51 personas han sido detenidas por esta trama que involucra a exministros, jueces, funcionarios públicos, entre otros. Muchos de ellos han sido cercanos al exministro de Petróleo, Tareck El Aissami, por lo que varios se preguntan ¿por qué él no forma parte de esta lista de arrestados?
Según el exministro de Comunicación, Andrés Izarra, «si esto fuera en realidad una guerra contra la corrupción, El Aissami debería estar preso, que es el jefe de todos los que están detenidos». Sin embargo, comentó que esto no ocurrirá ya que él conoce los «pecados» de varias personas dentro del chavismo.
«¿Cómo metes preso a Tareck El Aissami si él conoce todos los ‘pecadillos’ de la pareja presidencial y de los distintos grupos? Es difícil, es un paso que puede comprometer mucho políticamente. No sabemos cuál es el destino y dónde está. Se sabía que estaba custodiado en Fuerte Tiuna, lo han trasladado a otro lugar y su destino es una incógnita», expresó.
Durante una entrevista ofrecida al periodista colombiano Francisco Santos en Dossier Venezuela, Izarra sostuvo que hay varias tesis sobre los motivos por los que se desató esta investigación contra El Aissami en esta trama de corrupción.
«Hay una tesis que dice que el enfrentamiento vino por un tema de plata. Él no repartió el botín, pero yo dudo eso, yo creo que esto es un tema de poder. Tareck había acumulado tanta fuerza que representaba no solo una amenaza para los otros grupos de poder, sino para el propio Maduro. Era un poder que tenía tentáculos que se extendían hasta la FANB, cuerpos de inteligencia, relaciones internacionales. Hay otra tesis que dice que esto obedece a un plan internacional», acotó.
TARECK EL AISSAMI Y EL PODER
Tareck El Aissami fue ministro de Interior y Justicia en el gobierno de Hugo Chávez. A juicio, de Andrés Izarra, esto le permitió una «relación privilegiada» con el presidente. Precisamente por el acceso que tenía a fuentes de inteligencia y a los cuerpos de seguridad del Estado.
Sin embargo, indicó que es en el gobierno de Nicolás Maduro donde el «plan» de El Aissami realmente «se despliega, se desarrolla y él adquiere una relevancia política y un poder inusitado».
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«Él es una persona con mucha capacidad política y económica, con relaciones internacionales (…) con mucha ambición de poder y llegar a la presidencia era uno de sus objetivos. Pero los gringos lo meten en todas las listas posibles de terrorismo y narcotráfico, por lo que eliminan esa posibilidad de ser presidente. A tal punto que Maduro se ve obligado a sacarlo de la vicepresidencia, pero lo premian y lo mandan para Pdvsa y además como vicepresidente económico», dijo.
Ante esto, Izarra señaló que El Aissami «tiene gente en varios gobiernos regionales, ministros que están asociados a su grupo y maneja el flujo de dinero de Pdvsa. Tras las sanciones de Estados Unidos, se crea una dependencia de criptomonedas. A través de ellas se hicieron transacciones de pago, el cual resultó en un foco de corrupción gigantesco».
